Al centro, el director Alonso Ruizpalacios con el presentador, antes de iniciar la sesión de preguntas y respuestas |
A todas y todos los ex presos políticos del CGH y a los fundadores de la radio Ke Huelga
Si algo puedo
asegurar es que no se la esperaba. Acaba de ganar el premio a la mejor ópera
prima de la Berlinale*. Se codea con las grandes estrellas de la cinematografía
mundial. El mundo entero le está diciendo que es un genio y está estrenando en
Nueva York, donde casi sólo los güeros de Estados Unidos y los hijos de oligarcas
y políticos de México se enteran de que están pasando esas películas en el
Festival de Tribeca que fundó Robert de Niro, mientras que las muchedumbres de
mexicanos que no tienen acceso a la educación —ni siquiera gratuita, vaya, ni
siquiera de la que defiende la odiosa CNTE—, les sirven los bocadillos y les
cargan las maletas. Estaba flotando en
las nubes del éxito. No podía imaginar que alguien pudiera arruinarle su
première aquí ayer.
Y exactamente eso fue lo que hice. Aclaro
que iba preparada, pero inicialmente no fui a eso. Acudí, sobre todo, a ver el
estreno de Güeros, la ópera prima de
Alonso Ruizpalacios que, según había leído en las reseñas y sinopsis, parecía
estar hecha en contra de la huelga de la UNAM. Yo fui a que no me contaran qué
tal estaba ni de qué hablaba. Y, sobre todo, fui con la esperanza de disfrutar
lo que posiblemente fuera una buena película. Motivos había para suponerlo: el
Festival Internacional de Cine de Berlín es uno de los más prestigiados del
mundo (no como el de San Sebastián ni el de Guadalajara, que aunque hayan
mejorado últimamente comenzaron siendo una burla). Como guionista profesional
que también soy (o por lo menos, como dicen mis enemigos “fui”) acudí asimismo
con la esperanza de que las reseñas hubieran estado mal hechas o mal
informadas, o que las sinopsis exageraran esa parte del argumento con fines
mercadotécnicos, y que, a pesar de su título, el guion estuviera a la altura de
un reconocimiento mundial. Mi expectativa
profesional era, en suma, que el filme galardonado me deslumbrara como hacen
las grandes películas, y que ni el tema mismo (aún si fuera uno con cuyo
tratamiento político no estoy de acuerdo) pudiera separarse o desarticularse de
la magia que crean los grandes.
La otra posibilidad, mi segunda perspectiva
profesional, era que, como dije, la descripción en los boletines de prensa estuviera preparada para provocar, o el
título encajado para desconcertar pedantemente —como se acostumbra ahora en
mercadotecnia gay—, en cuyo caso el tema de la huelga de la UNAM sería incidental,
no dominante. Daría por descontado que yo apoyé desde aquí y formé una red de
solidaridad con los huelguistas en aquellos meses, informando lo que no
contaban los periódicos allá, explicando cómo fue el proceso de privatización
de la educación superior aquí (donde se utilizaron tácticas tan parecidas,
empleadas eficazmente aquí por el entonces alcalde Rudolph Giuliani, después
contratado por AMLO). No obstante lo cual, digo, también eso podía dejarlo
pasar sin armar olas públicas al final porque, vaya, si los huelguistas soportaron
las calumnias de la televisión diariamente y la mala prensa de todos los
intelectuales poderosos de México —no es poco decir—, una película en la que brevemente aparecen como
telón de fondo, descritos tal como los ridiculizó una amplia gama de
comentaristas, desde López Dóriga hasta Jaime Avilés, pasando por Guillermo
Sheridan, más caricatura no se les podía hacer.
Con esa mirada contemplé la primera
hora de esta película que, además, está coproducida por la UNAM.
Pero no resultó ninguno de los dos
casos. La película es, en un ochenta por ciento, aproximadamente, sobre la
huelga de la UNAM, en torno a ella, contada exactamente tal como la explicaron
los medios de comunicación al servicio de la plutocracia y los intelectuales de
La Jornada en defensa de los güeros, los moderados, que son
“los buenos” (o por lo menos los “no tan malos”) de este filme, sin ningún
contexto, y tal como la entendieron Gael García Bernal y Diego Luna en aquel
entonces.
El título es literal. Los güeros son los
protagonistas. Aunque imbéciles y güevones, por lo menos no son como los
prietos: unos vándalos que se agarran a golpes o que los asaltan en las calles,
o que los golpean. El líder de los prietos huelguistas se llama Furia. La chica linda de ojos claros es
la que tiene la razón. Los demás aparecen en escenas dionisíacas bailando en
torno a una fogata. La chica güera lleva meses en las guardias en la UNAM pero
abandona su compromiso por razones tan incomprensibles como lo fue la huelga
para el director, y en seguida abandona hasta a su personaje, cuando siendo
ella estudiante de Letras se pone como actriz a burlarse del tono con el que
hablan los personajes de Los Olvidados
(a ninguna estudiante de Letras le interesa específicamente burlarse de Buñuel;
al director de Güeros, en cambio, sí le importa dejarlo claro: “Somos
los güeros, no Los Olvidados, y nos
ganamos premios internacionales como Buñuel). A esas alturas, comprendo perfectamente
por qué ganó un premio internacional en tiempos de Peña Nieto. Salinas está de
vuelta. Pasada primera hora, la película no sólo parece estar en contra de la huelga
de la UNAM: parece hecha por la CIA, en un sexenio en que la administración
está resuelta a privatizar la educación. ¿Será? Yo sé que no. Yo sé que está confeccionada
por la estupidez de los televidentes y de los lectores de La Jornada, junto con la codicia de los Carlos Ímaz (quien cumplía
órdenes de Rosario Robles en aquel entonces, como se vio en los
videoescándalos), por los lectores de Monsiváis. Sé que ni la CIA lo habría
hecho mejor. He decidido quedarme a la
sesión de preguntas y respuestas para corroborarlo. Después de la escena de
burla de Los Olvidados y la forma
como hablan los nacos, ahora sí quiero conocer al director.
El público ríe a carcajada batiente en la
parte en la que los actores fuera de personaje imitan el acento de los nacos.
Tanto, que me hace voltear a fijarme quiénes son: los que tomaron los asientos
reservados, claro. Busco a la única negra que detecté entre el público al
entrar a la sala, y que se estaba riendo al principio: ya ni sonríe, claro.
Tampoco es tan tonta.
El resto del tiempo de la película sí me
preparo. ¿Qué voy a hacer? No sé. Lo único que sé es que nadie más va a defender
aquí a los jóvenes que preservaron la educación gratuita en nuestro país. Ríanse
los que están leyendo esto pero que en aquel entonces sólo veían televisión o
no leían más que los periódicos. De todas formas las universidades públicas en
Estados Unidos ya no existen, y eso es lo que se busca implantar en México. Si
hubiera una película en la que se hubiera ofrecido algún contexto de por qué
estalló esa huelga, por qué la resistencia, por qué los “moderados” eran los
rubios “buenos” que querían poner “un fin negociado” y los prietos eran unos irracionales
violentos “por culpa de los cuales todo se arruinó”, los jóvenes
norteamericanos ni siquiera sabrían de qué están hablando. Los adultos
recordarían una lucha que perdieron. ¿El resultado? Un muchacho de 21 años
estudiante de la UNAM, aún el más haragán, el más aviador, tiene una cultura
general más amplia que la de su equivalente a la misma edad en la reconocida
Universidad de Columbia o en la semipública (también cara) CUNY.
Lo que también recuerdan los adultos
espectadores son huelgas de más de un año. Eso no es novedad aquí, ni en ningún
lado. Para Ruizpalacios será un escándalo, pero la película que acaba de
dirigir el socio de su productor Gael García Bernal —Diego Luna— sobre César
Chávez habla de una huelga que duró cinco años. Me voy pensando en eso mientras
finjo salir al baño para regresar por la otra puerta, ahora sí, con un plan.
Mis años ayudando a Occupy Wall Street me
ayudan, pero sobre todo me asiste la memoria de los jóvenes. Ningún estudiante
debería ir a la cárcel en defensa de la educación gratuita. Me las arreglo para
ser la primera a la que le den la palabra, pues así establezco el tono de lo
que será la conversación y nadie más se atreverá a hacerle elogios desbordados
como hacen los leguleyos en estos eventos. Lo hago tartamudear muchas veces. Lo
obligo a explicarse. Termina contando cosas que nunca se imaginó que diría la
noche de su estreno en Nueva York.
—Primeramente, felicidades por todos tus
premios —le digo en inglés, con una sonrisa, y me encargo de que mi voz se
escuche por toda la sala, que está repleta—. Quería preguntarte, porque esta
película fue sobre un movimiento que defendía la educación gratuita en México,
cosa que aquí en Estados Unidos es inconcebible…
Aquí hago una mención que Ruizpalacios no
va entender, pero que va a resonar en los corazones de absolutamente todos los
jóvenes asistentes: las deudas para pagar las colegiaturas. Porque,
precisamente, ninguno de ellos va a una universidad completamente gratuita. Ése
problema es una de las raíces de Occupy Wall Street y su puente con los indignados de España y Chile.
—¿Tú estudiaste en una universidad
pública? —le pregunto, ya que termino.
—No. Yo iba a estudiar en la UNAM —dice
él, con voz quebrada—, pero la huelga me lo impidió.
—¿O sea que tú no fuiste educado en
universidad pública?
—No. Yo terminé estudiando en Londres.
—Eso es todo. Gracias —le digo.
A partir de ese momento Ruizpalacios se
tropieza muchas veces y no para de voltear a verme de reojo, hasta que dice:
—Es una huelga que duró muchísimo, once
meses.
—Y que ganaron —le interrumpo, con mi voz
sonora, pero calmada.
—Y que ganaron, o bueno…
—Y
de la que tú te estás burlando en esta película —le atajo.
—Sí, bueno, mucha gente dice que me estoy
burlando. Eso es algo que, si quieres, podemos discutir después. Mira: el actor
formaba parte del movimiento de huelguistas. La primera vez que leyó el guión
me dijo: “Esto es una basura. Te estás burlando de los huelguistas”. Pero
varios días después me llamó y me preguntó: “¿Cuánto pagan?”.
Risas… de los amigos mexicanos y de los
promotores del festival.
Los demás lo miran atentamente. Y me miran
a mí.
Yo les sonrío. Acabo de hacer que el
director confiese a la prensa que el propio actor reconoce que su filme es una
burla contra las huelgas estudiantiles, y que incluso pensaba que su guión era
una basura, y que solamente entró a trabajar en la película por dinero.
La noche no será como esperaban. Ruizpalacios
se limita a responder con anécdotas de filmación para no meterse en laberintos
conceptuales. Cierran la sesión de preguntas lo más pronto posible. Se irán a
cenar comentando: “¿Y quién es esa tipa? ¿Y quién la dejó entrar?”.
Alguna vez, hace muchos años, el ex
diputado federal del PRD Marco Rascón me preguntó qué me trajo a Nueva York. Yo
le contesté sin asomo de broma: el Diablo me mandó al centro del imperio
financiero después de todo lo que viví en México, que fue sólo un entrenamiento
para lo que después tendría que hacer.
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*No el de “canes”
como el Cácaro Gumaro sino en serio.
**El título de la crónica, se entiende, en honor a quien falleció también el día de ayer.
El conocimiento y agudeza mental que tiene la gran escritora Malú Huacuja del Toro es impresionante, a la hora de hacer sus comentarios y artículos relacionados con el tema a tratar, siempre nos sorprende con temas de interés social, cultural y artístico , mi admiración y respetos para ésta gran mujer que cada día nos ilumina con su sapiencia y picardía.
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ResponderEliminarGracias por tan acertada crónica. En la huelga los compañeros huelguistas del CUEC fueron, con los de la ENEO, los únicos güeros que entregaron voluntariamente sus escuelas a la PFP, una verdadera vergüenza. Nosotros en la Facultad de Psicología aunque al final de la huelga no coincidíamos con el grupo para entonces hegemónico los autodenominados "ultras"no les cedimos el espacio ni a la tira y hasta el último minuto posible sostuvimos la huelga. La carrera de cine, por su costo deja pocas oportunidades de cursarla a sectores no "güeros" y de ahí que permeen sólo propuestas peqeñoburguesas en nuestro cine.
ResponderEliminarLos huelguistas del CUEC, ni somos Güeros ni nos enorgullecemos del triste final del CGH. había que debatir, estamos listos, sobre lo que sucedió entonces. Y mirar que ha pasado con todos nosotros a lo largo de todos estos años, quien está dónde y desde que tribuna. Soy Mario Viveros, del cuec y del canalseisdejulio. Es triste leer una visión como la de Jesús Lozano, que critica las decisiones democráticas de nuestras asambleas realmente independientes. Y por otro lado, que ignora la importancia del CUEC en cuanto posibilita que una visión distinta a la de la industria cultural del cine mexicano dominado por gente con dinero, llegue a las pantallas, ese si cine universitario.
EliminarLos cuequeron que defendimos la gratuidad y cerramos nuestra escuela 9 meses hasta que los oídos sordos de aquellos que jugando el papel de "radicales" hacían sus cálculos políticos en un momento coyuntural, entendemos la importancia de esa lucha. La decisión de salirnos de un lugar en dónde privaron la violencia, las amenazas, la cerrazón y las púas fue nuestra, las autoridades fueron las que metieron a la PFP, y nosotros entendimos que: nada más se podía lograr en ese CGH, que la gratuidad estaba ganada y que nos tocaba terminar la escuela y salir a hacer nuestra vida profesional con toda la congruencia. Lo demás, son descalificaciones que rayan en el resentimiento y que ni vale la pena discutir.
Eliminarbuenisima pelicula, lastima que la tipa esta no la supo apreciar
ResponderEliminartienes toda la razón
EliminarHey "Anónimos" , osea productores y director. Vamos a boicotear su película en México, provocar que sea un fracaso de taquilla, que ya de por si las pocas salas que se le asignan al cine mexicano, en el caso de su mal lograda "película" tenga pésimas entradas. Si la el público quisiera conocer su trabajo, pues tendrán que descargarla. ¡Saludos!
EliminarYo preguntaré ¿Y en qué universidad estudiaste? ¿También eres un agraviado de la Huelga o también te fuiste a Europa a estudiar? ¿O comes del alma mater y le pateas el fondillo?
EliminarMe parece excelente la crónica toribia de Malú. Y certera la interpretación respecto de la película pinche de Ruizpalacios estilo Sólo con tu pareja. ¿Prietos y güeras? No mamen. Pero, pregunto: ¿El Mosh fue un gran dirigente estudiantil o el mejor infiltrado de Nazar Haro, cuando este asesino y tortudaror ya estaba fuera de la jugada en virtud de la "transición" salinista? No he visto al Mosh figurar --o comentar, escribir, participar-- en nada de izquierda desde entonces. Es un comportamiento anómalo para un dirigente estudiantil, así se vuelva socialdemócrata ligero o incluso de derecha --como en Chile--, pero típico de los infiltrados policiacos. Infiltrados que, no pocas veces, son sumamente raros. Esquizofrénicos o borderliners. Eso no cambia que lo del CGH fue un movimiento contra la privatización de la educación en México --ya muy avanzada para entonces-- y que, al mismo tiempo, desprestigió a la educación pública y favoreció a las universidades "patito", públicas y privadas. Nada que ver con el movimiento en Chile de los "pingüinos" --estudiantes de secundaria-- o el de 2011, de los universitarios, y que sigue en marcha contra el lucro en la educación En México, durante 1999, tuvimos varios gatos encerrados.
ResponderEliminarMi frase favorita de Nazar: "Para mí, López Obrador es como nosotros los policías, que andamos en las calles antes de llegar a puestos de dirección y mando. Y él, como político, comenzó en las calles de Tabasco agitando petroleros. ¡Yo sí estaba a su favor!"
JUAR (Jocosa, Ultrasonora y Asombrada Risotada): el director y sus cuates poniendo mensajes anónimos. Su trabajo no se ha estrenado en México. Nadie más que él y sus paleros lo han visto en español. Pero en algo tienen razón: lástima que no soy lo suficientemente cínica e ignorante como para apreciarla. Lástima que nunca imaginé que a alguien se le podía ocurrir hacer una película festejando el racismo en México y respaldando el prejuicio conservador de que las huelgas, desde la revuelta de Chicago por la jornada de trabajo de 8 horas (ahora que se acerca el 1 de mayo no está de más recordarlo), han sido cosa de "huevones", como bien él se encarga de reforzarlo en el primer parlamento de su heroína: "Lunes de hüeva, lunes de huelga", dice. (O martes, o cualquier otro día de la semana.)
ResponderEliminarGracias, Óscar E. Ornelas, por tu lectura. No sé dónde está “El Mosh” pero sí sé que todos los movimientos estudiantiles contra la privatización de la educación pública (o a favor de la reinstauración de la desaparecida educación pública, como es el caso de Estados Unidos), tienen infiltrados, aunque en sus aspectos específicos y desarrollos difieran, obvio, en cada país y momento histórico. Pero no contar con el trabajo de espías e infiltrados es un error táctico por parte de los estudiantes, porque todos los tienen. La labor de los agentes es precisamente ésa: desprestigiar al movimiento. Convertirlo en una caricatura. Desviar la atención en la falsa dicotomía: “excelencia académica o educación pública de pésimo nivel, con universidades ‘patito’”, hasta que la gente no pueda imaginarse la opción inicial Hacer que la opinión pública abandone a los huelguistas por hartazgo. Ridiculizarlos al máximo. Desenmarcarlos. Reducirlos a un chiste. Por eso es que esta película parece pagada por la CIA. Lo más asombroso es que ni siquiera requirió eso. Le bastó con la idiosincrasia de Alonso Ruizpalacios y la complicidad de sus productores (y de un actor sin escrúpulos, muy necesitado de dinero, por lo visto).
"El Mosh" lo desaparecieron precisamente por todo lo que acabas de mencionar, toda la ala intelectual izquierdista lo denostó, sumándole los bombardeos de las Televisoras, yo recuerdo bien como esos medios hacían coberturas en vivo, inducían en la opinión pública para tacharlos de criminales, hay que recordar que los líderes fueron encarcelados, humillados y presentados como narcotraficantes, al verse abandonados por la "izquierda" en el DF, el único movimiento que apoyó la huelga y a toda su gente fue el EZLN, hay escritos extensos de Marcos sobre ese conflicto. "El Mosh" reapareció hace pocos meses en una marcha de los maestros del CNTE en el DF, se le acercaron los medios y sólo se limitó a decir que es maestro en Michoacán, que se movilizó con sus compañeros. (ver nota) http://pulsoslp.com.mx/2013/08/28/reaparece-el-mosh-en-protestas-de-la-cnte/
EliminarNo, yo no olvido que sus líderes fueron encarcelados y difamados. Precisamente porque los recuerdo expuse esa infame película ante la prensa neoyorquina en su noche de estreno. Un periodista de medios alternativos fue a visitar la huelga porque los infundios en “The New York Times” eran demasiado exagerados para creerlos. A su regreso, en una conferencia con medios progresistas, contó que lo que a él le llamaba más la atención era la marcada diferencia de clases sociales que había entre los grupos. Y que era clarísimo que los que querían terminar la huelga cuanto antes aunque tuvieran que pagar cuota eran los de ojos claros, piel clara y acento coyoacanense. Que por lo general los de condición más humilde, con menos recursos y aspecto indígena eran los que no querían ceder al engaño de la llamada “cuota baja” (algo que les impusieron a los estudiantes neoyorquinos y que es el primer paso de la privatización, pues como las tarjetas de crédito “de bajos intereses”, sólo sirve para enganchar: al segundo año comienza a subir con excusas legaloides). Su condición de extranjero le permitió percibir de manera inmediata lo que los columnistas no querían ver. Además, llamar “ultra” a quien no quiere ceder un paso fundamental para evitar la privatización de la universidad es de por sí un calificativo con dolo propagandístico. Más me llama la atención que la gente no se pregunte dónde están los líderes “moderados” ahora: casi todos tienen un puesto en el Gobierno del DF, ¿qué no? ¿Y qué decir de Carlos Ímaz con su ex esposa Claudia Sheinbaum, la colaboradora de AMLO que asegura no haberse enterado de nada y no tener nada qué ver con lo que hacía su marido bajo las órdenes de Rosario Robles? ¿Quiénes son los desaseados, los cochinos, los destructores? Me acuerdo de la campaña incesante presentando a los huelguistas como unos cerdos y vándalos. Publicaban fotos de ratas y les ponían de pie de foto “En la UNAM”, pero podían haberlas sacado en cualquier basurero… o en el metro de Nueva York, ja, ja.
EliminarLíderes? no mamen. Los líderes los inventó la prensa reaccionaria y la dizque progresista y por supuesto la tira. Ese fue un movimiento tan peligroso para el estado y el main stream porque precisamente no los hubo. Se alargó tanto porque no hubo con quien "negociar", y los supuestos diálogos en minería, como bien adviritó el sup, sólo fueron para ganar tiempo para dar la puñalada traidora.
EliminarY NO ganamos. Sí, mis sobrinxs acaban de terminar sus carreras ahí porque aún es gratuita. Pero la mierda neoliberal se cuela en los planes de estudio y con el odioso ceneval (no quiero atizar el racismo, ni soy racista pero me permitiré la licencia poética: ) ahora la unam se está llenando de güerxs, no sólo de lxs güerxs de aspecto, sino lxs que prietxs se esfuerzan por hacerse pasar por güerxs. Una muestra? En el reciente conflicto con los CCHs, quiénes brincaron con las reformas privatizadoras? Lxs mismxs vándalxs de siempre, lxs lumpen, lxs ultras, lxs cochinxs, lxs mugrosxs, lxs huevones, lxs fósiles, lxs prietxs, lxs anarquistxs, lxs etcéteras que tomaron (oh gran atrevimiento!!!) rectoría por unos días.... quién mas hizo algo?. Por cierto el policía de Narro junto con el facho de Mancerdo tienen bajo proceso judicial a varixs chavitxs con pretexto de la marcha del 2 de octubre... quesque tomaron un camión, quesque aventaron petardos, quesque uno iba manejando, quesque etc, puras mentiras que hasta los propios peritos del MP desmintieron... aún así, siguen en proceso. Mención aparte merece el compa anarquista Mario González al que la "juez" Marcela de los Angeles Arrieta decidió no darle derecho a fianza y al que condenó a 5 años 9 meses de prisión en un claro y cínico montaje. el compañero estuvo 56 días en huelga de hambre!!!!!! y su salud aún no es estable. http://solidaridadmariogonzalez.wordpress.com/ Presxs a la Calle!!!! En fin Malú ni te conocía pero que chingón que un compa mío me envió este link. te rifas !!!! Y a 15 años de ese bautizo ácrata que fue para muchxs la huelga cegeachera puedo decir que lo que sí ganamos fue experiencia, necedad & furia : acá seguimos lxs prietxs (& güerxs), lxs sinlíderes, lxs derrotadxs pero nunca rendidxs ni sumisxs, acá seguimos haciéndosela de a pedo al culerísimo poder y sus miles de advocaciones. Y no pongo mi nombre porque sólo soy uno entre lxs muchxs (o pocxs, eso poco importa) que somos.
Te felicito por tu crónica. Y sobre todo por tu valentía. Que bueno que hayas puesto al descubierto a esos infames clasistas. La arrogancia y el orgullo racista, "clase mediero", se lo tuvieron que tragar, ahí, en el pleno centro financiero-cultural del planeta. Los pusiste en evidencia de manera genial. Hay que compartir tu nota y armar protestas ahora que esa película se empiece a difundir en México. Es vergonzante como esos sujetos se burlan de un gran movimiento estudiantil que GANÓ la gratuidad para miles de jóvenes. Yo no participé en ese movimiento porque yo estaba saliendo de la secundaria en ese entonces, pero recuerdo que uno de los primeros momentos en que sentí RABIA contra el gobierno fue cuando la puta PFP entró a la UNAM y encarceló a más de mil compañeros huelguistas. Gracias a lo que esa huelga logró miles de jóvenes que venimos de familias obreras y campesinas pudimos ejercer un derecho básico: la educación.
ResponderEliminarMuy interesante tu nota como hacen falta voces como la tuya, no tenia idea del transfondo de la huelga y como es costumbre que salga una cinta con la versión oficial y manipulada por que así nos quieren manejar,cuanta injusticia.
ResponderEliminarSaludos
Lo que te hace falta, Malú, es tener sentido del humor. No entendiste nada. Ni de la película, ni del encuentro con el director. Hizo un chiste sobre el actor, por ejemplo, y quisiste escuchar una confesión.
ResponderEliminarLa verdad, no importan mucho tus delirios, tu paranoia. Si no fuera porque a través del blog condicionas a la gente que, sin haber visto la película, ya sugiere el boicot. Ahí ya eres un peligro, por suerte con poco poder. Pero pregúntate por qué quien no comparte tu opinión publica desde el anonimato...No vaya a ser que un día tengamos que padecerte en una posición de poder. Tal vez no podremos contarlo.
El director de la película te invito a debatir. Tú te fuiste. No hay mucho más que decir.
Ja, ja. Eso sí es muy buen chiste. El paranoico firmando como anónimo acusándome de paranoica a mí que doy la cara y que siempre he firmado con mi nombre. No seas mentiroso, Alonso. Sabes perfectamente que me quedé hasta que se dio por terminada la sesión de preguntas y respuestas. Lo sabes porque yo estaba sentada hasta el frente y tú me mirabas constantemente. Gracias por diagnosticarme “lo que me pasa”. Tienes razón: no tengo sentido del humor. Quizás por eso viví de escribir espectáculos de cabaret político en el Bar El Hábito de México durante cinco años. Pero hay una regla que los guionistas de cabaret sí aprendemos bien: no regañar al público si no se ríe de nuestros chistes ni pontificarles que “lo que pasa es que nosotros sí somos muy graciosos y ellos no nos entienden”. El que queda pésimo eres tú o tu palero. Y no hay nada más chistoso que un director que se cree gracioso regañando al público por no reírse de sus comentarios.
EliminarEl peligro es el director que humilla a sus actores contando en público sus infidencias, y que encima alega que “eran broma”. Evidentemente no te has fijado, pero los directores más valiosos y experimentados no exponen a sus colaboradores artísticos y técnicos en público, ni de broma ni en serio. Lástima que eso no te lo enseñaron en Londres.
Hablando de “peligros”, me llama mucho la atención que inmediatamente supongas que yo aspiraría a un puesto de poder y que ya te empieces a imaginar lo que sucedería si yo fuera funcionaria (¿qué te crees que todos somos Poniatowska o López Obrador, que todos queremos mangonear al mundo entero y acrecentar nuestro rebaño de descerebrados?), tal vez porque es a lo que realmente aspiras tú. Me parece genial tu temor, después de que aguantas el poder arbitrario de todos los tlatoanis de la intelectualidad orgánica mexicana.
Por lo demás, sábete que en modo alguno invito a boicotear y protestar contra tu película sin haberla visto. Les estoy diciendo que la vean para que sepan de lo que hablo: a ver si a los que fueron golpeados y pateados por la policía antimotines en las marchas y a los jóvenes que fueron a dar a la cárcel por esta lucha les pareces tan “chistosito” como te crees. A ver si a ellos también les diagnosticas que “lo que pasa es que no tienen sentido del humor”.
No, nunca les pediría que den una opinión o hagan una protesta desinformada. Eso sólo lo hace Alonso Ruizpalacios sobre los temas que aborda en sus películas.
Excelente respuesta a Pinky y Cerebro, perdón: Anónimo y Anónimo que estuvo ahí pero... ¡caray! Tiene que protegerse del poder de tu pluma, Malú.
ResponderEliminarSi ya está en la red pasen en link para verla porfavor . Atte. Martha chávez
ResponderEliminarNo, Martha, no se ha estrenado. Yo les recomiendo que la vean... pero no que la compren. No es justo que, encima, paguen por eso. Ojalá puedan conseguir una copia y verla entre muchos. Saludos.
EliminarSí, que la compren... pirata ;)
EliminarHola! Soy española y activista, y mi novio es mexicano y activista también. Muchas gracias por tu artículo y por cómo actuaste en la presentación de la película :-) Me he quedado pensando, con todos los grupos que hay en Estados Unidos que se ocupan del tema del racismo, ¿no se podría mover una denuncia o algo?
ResponderEliminarSaludos
Violeta: Una vez vista (por medio de amigos que tengan copias o pagando su boleto como yo lo hice), cualquier persona que considere que la película es racista y que se sienta personalmente agraviada tiene derecho de protestar públicamente -en México y en cualquier parte del mundo-, y de poner una página de denuncia en redes sociales, aunque el coguionista y el director no lo consideren así y continúen escribiéndome (como llevan dos noches haciendo, y como insisten en este preciso momento), insultándome y descalificándome. No sé qué les hace creer que, además de tener todas las tribunas del mundo (prensa, televisión y radio) por haber ganado un festival internacional, pueden venir a mi blog personal a darme órdenes y a exigir que publique sus excusas. El peor guionista del mundo es el que tiene que aclarar de qué se trata su película o cuál es el tema porque le da coraje que alguien no entienda exactamente lo que él quiere (porque no tuvo la destreza en su oficio para expresarlo), y eso es lo que está haciendo el coguionista de “Güeros” en este momento. El otro energúmeno me compara con “la ultraderecha gringa” (¿?) y “con Stalin” (¡!) en un mismo “post”. Ya nada más le faltó Hitler. (Como dice un amigo muy inteligente y, ése sí, con mucho sentido del humor: “¿No me lo pueden poner por orden alfabético?”). Ya se están asemejando peligrosamente a Ripstein cuando demandó a Ayala Blanco porque no escribió lo que él quería.
EliminarEllos ya tuvieron su tiempo para pensar lo que hacían. Si no lo pensaron, ¿de quién es la culpa? Es increíble que teniendo todos los medios de comunicación a su disposición sean tan prepotentes como para venir aquí a calumniarme y darme órdenes ambos. ¿No les basta con haber ganado un premio en Berlín por burlarse de los huelguistas de la UNAM? No, por lo visto. Tienen que silenciar todas las críticas. Pero, por supuesto, no pueden impedir lo que dijeron ya.
Gracias Malú. En este tiempo de canallas es necesario levantar la voz. Los "güeros" de la huelga como Belauzarán, que al no poder montarse sobre el movimiento y lo comenzaron agolpetear junto con algunos columnistas de la jornada, hoy son los peor de lo peor del PRD: los chuchos, que solaparon al alcalde de Iguala, uno de los responsables del asesinato de los normalistas en Ayotzinapa.
EliminarDenuncien a la señora Malu que fue la que noto a la "negra" desde que entro a la sala. Y Violeta contextalizate antes de sugerir estupideces
EliminarEstás hecha una fiera, pequeña torquemada..
ResponderEliminarYo no entiendo esos egos tan gigantescos que pretenden silenciar toda crítica. ¿De qué estarán hechos, que se sienten tambalear si alguien no les hace caravana? ¡Cuánta inseguridad personal y sobre todo, cuánta culpa no sentirán en su fuero interno, que ni todos los premios del mundo son suficientes para aceptar UNA crítica y entender que el ejercicio crítico real (no simulaciones temerosas), es condición necesaria para el desarrollo de la creación en toda cultura! Atte: Lucila Esperanza.
EliminarEnorme tu crónica Malú, toda tu crítica y planteamientos bien fundamentados. De pena ajena los comentarios de "anónimo 1" y "anónimo 2". Ya veremos cuando llegue a México cómo le va, de entrada voy a verla, tenía curiosidad desde antes porque justo me tocó la huelga casi recién ingresando a la UNAM y se bien del trabajo sucio que hicieron los medios orquestado desde el Estado, así que, seguro me va a sacar dos que tres agruras.. Un hallazgo tu blog.
ResponderEliminarFelicidades, el periodismo combativo es necesario en estos dias, no he visto la pelicula y no pienso pagar por verla, me esperare a que aparezca en youtube donde seguramente algo tan poco interesante terminara,..
ResponderEliminarQue bien escribes, felicidades, si la huelga da de que hablar 15 años después, si es necesario seguirla denostando, solo puedo pensar en aquello de que "si los perros ladran, es que algo les sigue doliendo chancho panzas", comencé leyendo al revés, los comentarios y terminé leyendo tu texto. Que "cómodo y pulcro" escribes, ¿no has escrito un libro?...
ResponderEliminar¿Periodismo?¿ y por qué censuras a quienes opinan diferente a ti?
ResponderEliminarMe da mucha risa que el director, el guionista, el productor y sus cuates guionistas se sientan “víctimas” mías e incluso “censurados” por mí, como se sintieron víctimas de la huelga siendo los “güeros” que tuvieron la opción de irse a estudiar cine a Londres e incluso terminar filmando una película burlándose de los huelguistas de la UNAM. ¿No es ya hora de que se enteren de que ellos no son víctimas de nadie, ni mías, ni de los estudiantes que no terminaron la huelga al momento en que a ellos se les dio la gana, para que ellos pudieran terminar una carrera que igual se podían pagar en Londres? Ellos ya hicieron su película. Ya tuvieron todo el tiempo para pensarla, ¿o no? Ya se les dio el presupuesto de la UNAM y del Imcine para hacer su ópera prima e incluir en ella sus chistoretes (“Lo peor es que sea con dinero del erario”, se burlan incluso en un parlamento dentro de la propia película, creyéndose simpatiquísimos en su insolencia, ¿o van a volver a decir que “deliro”?). Ya la terminaron. Ya brindaron en su fiesta de “wrap-up”. Ya se acostaron todos con todos. Ya se separaron. Ya ganaron uno de los premios más importantes de la cinematografía mundial (el premio a la mejor ópera prima del Festival Internacional de Cine de Berlín). Tienen la prensa internacional a sus pies diciéndoles que valen mucho. ¿Por qué no le creen a la prensa de Hollywood? ¿No le creen a la reseña elogiosa del “Hollywood Reporter”? ¿No les creen a los encomios del “Variety”?
ResponderEliminarTienen razón: yo tampoco. Y es que en tres días, además de exigir que se les conceda por su condición privilegiada un terreno de juego completamente desigual (como acostumbran), me han comparado con “Stalin”, con la “la derecha en Estados Unidos” y con “Torquemada” porque no obedezco a un director y a su una banda de compadres que, además de hacer una película con un discurso muy refutable y racista, no ha hecho más que demostranos a mí a los espectadores potenciales que ellos tampoco le creen al "Hollywood Reporter". Vaya: ni al jurado de la Berlinale. Algo le sabrán. Me ponen más atención a mí que a sus propios trofeos. Por algo será.
¿Entonces quien sea que no esté de acuerdo con tu punto de vista tiene que ser el director, co-guionista o el productor de la película en question? Ahi si creo que pierdes una poco de credibilidad como periodista. Aparte de eso está muy entretenida la nota en si. Felicidades y saludos.
ResponderEliminarNo, no "quien quiera": nada más el coguionista, el director iracundo y sus compadres y colaboradores, que son los únicos que han visto por el momento la película (además del jurado y los reporteros angloparlantes que no dominan muy bien en español, que no tienen ni idea de que se están burlando de una huelga en la que hubo gente que fue a dar a la cárcel y que fue pateada en la calle por la policía antimotines, y que no entiende nada del racismo en México, y a veces ni en su propio país), y que son los únicos que pueden ponerse tan furiosos como para ser, efectivamente, el director y sus compinches.
EliminarOk pero la realidad es que por lo menos mil personas la han visto en el Festival de Berlín que dices ganó y ahora en NYC se han estado agotando las entradas y ya va por lo menos una función con público en general según tengo entendido por tu reporte.
EliminarExactamente: de las personas que estaban en esa sala, nadie (con excepción del director y sus compinches) tendría interés alguno en escribir a este blog para compararme con Stalin o con la ultraderecha en EEUU ni para hacer comentarios tan llenos de odio y prepotencia como: “Deliras, mi pequeña censora”, o “Ya tuviste tu momento de gloria” (¿?). Es más: yo me encontré unos amigos esa noche y no tendrían ninguna razón para decirme algo así. Y, perdóname pero ya suenas mucho a productor o a amigo de los productores y los organizadores, no sólo por the word “question”. Existe algo que en Estados Unidos tú debes entender bien, que se llama “conflicto de intereses”. Si un productor metió su dinero en una chistosada conservadora y hasta racista, tiene que afrontar las consecuencias en lugar de venir aquí con estadísticas de cuántos han visto la película.
EliminarPues que lamentable que se mofen de la realidad educativa en Mexico, y que a través del cine los clichés sean lo que comercialicen y realmente una conciencia social....
ResponderEliminarLo único que puedo decir es esto: los hiciste mierda.
ResponderEliminar...
¿O ya lo eran?
Malú, gracias por tu valentía. Has actuado con verdad. En la huelga de la UNAM no hubo líderes. Y los fundadores de la Ke-Huelga hoy estamos en muchos sitios, y algunos tenemos doctorado, gracias a nuestra conciencia adquirida durante la huelga. Un abrazo
ResponderEliminarMalú, antes que nada te diré que te conozco y aprecio desde que hiciste alguna colaboración en la revista el Chahuistle, y te escribo estas líneas esperando que no lo tomes a mal, pues al final, una persona crítica como tú, debe estar también sujeta y acostumbrada a la crítica. No había comentado nada sobre la película hasta verla (al contrario de tus lectores) y tengo que decir que me gustó bastante y de lejos a mi parecer es la mejor película mexicana del año. En cerca de 200 películas que he visto en el cine en los últimos tres años, nunca había sucedido lo que pasó con Güeros: El cine (lleno, en el Festival de Morelia) estalló en aplausos a la mitad de la peli, justo en la escena en donde los protagonistas critican el cine nacional festivalero. Con todo respeto, pero me parece que esa noche, -como te lo dijeron- te faltó sentido del humor...al menos esa noche. A mi me ha pasado, hay veces que una película no me hace feliz debido a mi estado físico, emocional o espiritual, y en una segunda vista, le encuentro las virtudes que no le pude encontrar en la primera. Y también me parece extraño, que tu como guionista, no hubieras señalado las virtudes de guión, dirección y fotografía que tiene la peli. El entramado de microhistorias es notable, así como la caracterización de los personajes. Me parece también genial la capacidad de burlarse de medio mundo, incluyendo de si mismos y de la historia -en el actor que cuida la barricada, quien dice que el guión prácticamente es una basura-. Además, estoy convencido que la película NO trata sobre la huelga. Trata más bien sobre fraternidad, amistad, búsqueda de identidad, inanición, hartazgo, aburrición, en el CONTEXTO de la huelga. Como egresado y profesor de la UNAM, en ningún momento me sentí ofendido y no me pareció que se denigrara ni a la huelga ni a los huelguistas. La huelga -y todo lo que existe, existió y existirá- en nuestra Universidad, permite, -y así debe ser- múltiples miradas, debe ser vista con múltiples vistas y matices, y por supuesto que esta película, aunque la retrata perifericamente, nunca se propuso ser un documental ni película que narrara a cabalidad la huelga. A riesgo de sonar mamón (sonaré, lo siento), pero o tu tienes la razón, y es mala película que no merece el pago de un boleto o San Sebastián, Tribeca, Morelia, Jerusalén, Berlin, Mantarraya films, la muestra internacional de la Cineteca y yo, fuimos brutalmente engañados. Creo que al menos, esta vez, deberías dar el beneficio de la duda y conceder que tal vez te equivocaste en la apreciación... (y no tanto a mi, que solo soy un cinéfilo entusiasta, politólogo, y estudiante de cine de primer semestre, si no a los comités de selección y jurados de los festivales citados). ¡Saludos!
ResponderEliminarDiego:
ResponderEliminarGracias por tomarte la molestia de leer mi crónica y escribirme. ¿Así que de todas las novelas y colecciones de relatos que he publicado y de los diez años que colaboré para la sección cultural de “El Financiero” (cuando el director era Víctor Roura), muchas veces los mismos días en que publicaba el crítico de cine Jorge Ayala Blanco, y de los cinco años que trabajé como guionista de Jesusa Rodríguez, tú sólo conoces mi obra literaria por un artículo en una revista en la que no colaboré?* Bueno, ahí tienes el ejemplo: yo también te puedo decir que de eso no se trata mi producción literaria, Diego, ni mi vida, ni el contexto en que se desarrolla; que “Un Dios para Cordelia” es una novela de ciencia ficción política antes de que otros autores (varones) hablaran de eso en México y que “La lágrima, la gota y el artificio” es una novela sobre una mujer detective mexicana antes de que se pusieran de moda en México las telenovelas de Epigmenio Ibarra. Te puedo explicar y mostrar todo mi trabajo, para insistirte en que “de eso no se trata mi obra” y que “tú no me conoces”, pero mi vida no es una película: si nunca te cruzaste con mis libros es tal vez porque te interesan otros o no fuiste a las librerías donde se venden, como El Sótano, por ejemplo. Y si nunca leíste “El Financiero” es tal vez porque das clases de cine pero las reseñas de Jorge Ayala Blanco, no te interesaban… O tal vez sí, pero solamente leías su parte y la mía no. Hay un sinfín de razones por las que “yo no me trato de eso que tú crees”, Diego… en la vida. En cine, en cambio, y sobre todo en cuestión de temática (documental o ficticia), sí hay responsables, y muy particularmente el guionista al servicio de un director está encargado de que se entienda o no se entienda de qué se trata una película, y si el director tampoco entiende qué está haciendo, es responsabilidad del guionista guiarlo (y si eso es imposible, también es su responsabilidad renunciarle antes de consumar el endriago). Ni el director ni su guionista ni su productor entendieron que se están burlando de los presos políticos; se creen víctimas de la huelga porque “duró mucho” y porque son güeros, no tienen ninguna cultura sindical y —a diferencia del ex huelguista que ahora es doctor gracias a la educación pública y que lo agradece— consideran que el suyo es un “exilio generacional” (aquí te enlazo la declaración de Gael García Bernal, director de la casa productora de “Güeros”). Te aseguro que ni ellos saben bien cómo contar lo que querían. Por eso los actores de pronto se salen del personaje y se ponen a hacer chistes clasistas sobre el cine mexicano (que fue la parte que le dio mucha risa al público de Morelia, conformado mayoritariamente por directores, técnicos y estudiantes de cine). Ahora en ese festival el director Alonso Ruizpalacios dijo que la huelga a la que se refiere la película “no es la de la UNAM” sino “una huelga ficticia”, mientras que aquí sí mencionó frente a mí específicamente a la huelga del 99 que, “además –dijo con hartazgo- duró mucho”. También “Babel” era ficticia y tiene un contenido clasista y xenófobo retratando a una inocente pareja de gringos blancos, víctimas de las estúpidas nanas mexicanas y los cretinos adolescentes musulmanes que matan hasta por error. Lo mismo hace el director de “Güeros”, aunque esté muy bien conectado y aunque sus colegas lo festejen. En tiempos en que el Estado emprende un ataque estratégico contra la educación pública, muy especialmente contra las normales rurales como Ayotzinapa (con una tradición de vida comunitaria y de disciplinada lucha por su derecho a la educación pública), esta película “Güeros”, con sus personajes caricaturizados y la victimización de los “güeros” se inserta en la estrategia de desacreditar a los estudiantes que luchan por sus derechos. Por eso la premian tanto. Si es consciente o inconsciente, eso es lo de menos.
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*Yo colaboré en “El Chamuco”, primera etapa
No se quien sea la autora pero que bueno que hay alguien que vela por todos nosotros y nos defiende tan elocuentemente de la humillacion subliminal de estos agentes del poder. Ojala algun dia ella tambien logre escribir una pelicula que realmente me represente y a todos nosotros los olvidados y dejemos de ser victimas de los mecanismos de bajo presupuesto del poder zionista.
ResponderEliminarMalú!
ResponderEliminarUna pregunta, arriba mencionas que vas a poner el link de la declaración de Gael García Bernal, director de la casa productora de “Güeros”. Pero no lo encontré. ¿Lo podrías volver a poner por favor?
Saludos!
https://www.youtube.com/watch?v=mXyfEDfEsCc
EliminarLo que sea de cada quién, una película como la arriba descrita sí está basada en por lo menos dos errores muy graves, pero la huelga sí duró mucho. El objetivo se logró, qué bueno. Pero los más famosos se embriagaron de poder y olvidaron para qué existe la Universidad. A mí lo que me duele es la investigación de muchos científicos que ya no se pudo continuar.
ResponderEliminarGracias a su resistencia se preservó la educación superior pública gratuita quince años más. Quince años sí son “mucho” tiempo. Pero la gente que sólo exige satisfacción inmediata para sí misma piensa como Ruizpalacios y productores que lo acompañan: “Apoyamos las huelgas de cinco minutos, no más” (y, si no, nos vamos a estudiar a otro lado cine para burlarnos de ustedes después). O como la huelga de hambre de Carlos Salinas de Gortari, que duró un día, ja, ja.
ResponderEliminarPor lo demás, los propios huelguistas que han visto la película dicen que eso de los experimentos científicos que se echaron a perder no es cierto, pues ellos siempre dejaban los laboratorios abiertos precisamente para eso. Por desgracia,, mucha gente se basaba sólo en lo que leía en “La Jornada”, y ahora sólo en lo que vio en la multipremiada película. No averigua más.
Hola me recordaste a la mujer que amenaza al personaje principal de la pelicula birdman quien le advierte que con su critica a su pelicula la hará pedazos, solo te pregunto, crees que lo lograste? Puedes tener baces pero tus intenciones son leoninas , te quiero preguntar tambien alguien ha saboteado tu trabajo, por ultimo y permite tambien pedirte que no borres los comentarios negativos o no a fin de tu particular forma de pensar y opinar deja que la gente sea libre!
ResponderEliminarPero tú, el director y sus compadres, no son “la gente”, sino un club de admiradores de sí mismos que no soportan la crítica pese a los premios internacionales y la orquesta de elogios. Yo ya expliqué por qué no publico ni respondo a quienes tienen a su disposición toda la prensa nacional y mundial y los medios de comunicación como tribuna. (Vaya: tienen hasta a MVS para hacer sus shows en defensa de otra enemiga de los anarquistas: Carmen Aristegui, ¿qué no?). A mí me recordaste la película “El ángel exterminador” del director (Buñuel) del que tanto te burlas en “Güeros” en la escena de “rompimiento brechtiano” que te festejaron los cineastas y paleros tuyos. Digo “tuyos” porque, obviamente, quien manda este mensaje anónimo es el director o alguno de sus cuates. ¿Quién va a venir a visitar esta nota y a poner esto si no eres tú o un amigo del director que trabajó en la película, que está obsesionado y que no admite una crítica que ni siquiera es cinematográfica, sino política? No puedes escaparte del asombro que te causa que alguien no diga exactamente lo que tú quieres y sigues dando vueltas en esa iglesia de ti mismo. Eres tú quien se imagina que te amenacé con “hacerte pedazos” cuando sólo pregunté algo al director que lo expuso, no como cineasta sino como ser humano. Si leyeras bien, te darías cuenta de que esto es una crónica de un cuestionamiento político, por lo que tu comparación con un personaje de una crítica de cine ni viene al caso. No es mi obligación responderle ni darle tribuna. Para solucionar tus problemas psicológicos, te propongo que la próxima vez te asegures de que tu película la vean solamente tus amigos cineastas, tu crew y los actores que buscan chamba. Así los tendrás a todos uniformados en sus comentarios.
ResponderEliminarHola =)
ResponderEliminarc´mo stan?
Respondiendo al Director y los irrealizadores:
Soy Puma egresado de la otrora ENAP (Escuela Nacional de Artes Plásticas), huelguista de ninguna filial política, de los prietitos greñudos entusiastas o naquitos idealistas que hablamos cantadito... así como el Jaibo y el estilos, que es de otra peli también muy recomendable ;)
La educación pública me enseñó a pensar, a ser OBJETIVO; a veces por los madrazos que te dan los impacientes Maestros y exquisitos compañeros, a veces por los madrazos que te da la realidad por resistir contra decisiones político-económicas que afectarán el rumbo de tu vida (si no tienes posibilidades de estudiar en universidades privadas o incluso en London, lo escribí bien?)
Ahora, la UNAM-ENAP me enseñó que el Arte es un lenguaje universal (o que debería serlo), me indicó que la formación del Artista y su obra es social (por más abstracta e ilegible en apariencia) que la realidad y los eventos sociales tienen múltiples aristas a decodificar o interpretar, que debes ser crítico-objetivo, que para construir discursos Artísticos "fuertes" debes documentarte, debes participar, y contemplar la realidad Tú mismo para formar un juicio deseablemente imparcial y así comunicar lo que ES, sin tendencias, filtros personales o prejuicios... también me enseñó que el que expone se Expone... y que la audiencia no captará tu idea genuinamente como tú deseas en tus primeros trabajos, Obvi!! (dice la chaviza de hoy)
Ah! y, la Huelga junto con mi educación pública de Arte en la ENAP-UNAM (que no gratis, por que la manutención y financiamiento de un educando cuesta... y como tal vez sabrás, aprender Arte mucho más) que me heredó el movimiento estudiantil de 1986... me ENSEÑÓ que el Artista se hace con su Obra, no de un ego famado de aceptación y elogio incondicional. Quieres sucumbir como Director? como Artista? Evádete, no aprendas de la crítica objetiva...
Crecerás, madrazos siempre habrá, sólo sube la guardia para no repetir errores y tu trabajo mejorará para tu bien y el de la audiencia (por Amor a Dios)
Esto es un gran aprendizaje para ti: Documéntate, no reduzcas la complejidad política a tu visión particular, ni hables ligeramente de un fenómeno social como nuestro Movimiento Estudiantil... y una muy personal que me costó varios chingadazos aprender: el verdadero éxito no es una ópera prima... pregúntale a tu Director favorito.
Continúa
Sigo
ResponderEliminarIgual podrías hacer una secuela "Stuvo de guevos"... tch tch, no, ya en serio, tu próxima peli será mejor, por ahora muérdete un huevo (perdón,: aguántese como los machos y mejore su proceso creativo, sal del montón de cineastas mexicas Jitsters... o como chingado se hagan llamar... Menos pose y más sapiencia... neta, hay pocas pelis que llegan a la raíz del problema humano. Bueno, ya, te mando un abrazo lleno de carnalismo y mis mejores deseos.
Saludos y gracias por Ser a Malú, tan Chula. Un abrazo con Causa, una flor y una posdata para ella:
Recordar que sólo el entrañable Analista y Catedrático de la UNAM, Luis Javier Garrido de la Jornada que en gloria esté -AHUEVO- escribía con razones objetivas y causa a favor de nuestro movimiento... y en la fase dura de los últimos meses, en el desgaste, el miedo, los momentos de zozobra, el linchamiento y hostigamiento de los medios, los alumnos no paristas, los grupos de choque y porros infiltrados e identificados en las manifestaciones con un paliacatito mamón de color rosado, las autoridades de la UNAM, el CISEN, el ejército vestido de PFP y demás engendros nongratos, CUANDO TODO ESTABA EN CONTRA NUESTRA, SUS ARTÍCULOS Y AGUDEZA POLÍTICA NOS DABA ALIENTO Y FUERZA PARA CONTINUAR, GRACIAS MAESTRO. Mil gracias también por el infinito apoyo, los lazos de Amor y lucha a los hermanos del Barrio de Santiago en Xochimilco, EZLN, SME, Ocupa España, Ocupa E.U., Malú nuevamente, Unite Francia, a mis compañeros de lucha del Comité de Huelga de la ENAP en su momento y espacio los he reconocido, están en mi corazón.
Neta, La Huelga no fue de hueva, fue de lucha, solidaridad y vasto aprendizaje. No veré una peli de nuestro movimiento que me haga rabiar.
En el Camino seguimos
Un huelguista
Me parece que tu critica es toda una mierda, JAMAS hablaste de que te parecio la pelicula por su fotografía, secuencias, actuación. El problema de "criticos" como tu es que todo lo relacionan con su "guerrilla pollitica". Es una lastima que joyas del cine se destrocen de esta manera por gente como tú.
ResponderEliminarGracias por tu opinión, pero yo no soy crítica de cine. Si quieres leer a un crítico de cine te recomiendo a Jorge Ayala Blanco. Esto es una crónica de una acción directa hecha por razones políticas ante una película multipremiada y alabada por motivos políticos. Si contara la verdad sobre lo que pasó en esa huelga y por qué puso a la opinión pública mexicana en contra de los huelguistas que fueron a dar a la cárcel — con esa misma fotografía y esos actores que tanto te gustaron— no la habrían galardonado. La premian porque es retrógrada y racista, porque festeja la abulia en la juventud, como se premia y se festeja en Estados Unidos la teleserie “Girls”, que va en el mismo tono pedante. Yo emito un juicio político sobre este trabajo. No es mi obligación hablar de la fotografía cuando está borrando la historia y burlándose de los valientes estudiantes que defendieron la educación superior gratuita. Por lo demás, éste es mi blog personal. Tengo todo el derecho de pagar por ir a ver una película (aunque sea el berrinche de un director narcisista, racista y sin ninguna cultura sindical como es éste) y de publicar mi crónica. No tengo el poder ni la intención de destrozar ninguna “joya del cine”.
ResponderEliminarQuiero compartir mi profunda ignorancia al respecto de la Huelga, y mi vergonzoza existencia aleccionada por los medios de comunicacion. No podemos juzgar a la pelicula como "mala", de hecho reproduce muy bien el discurso oficial. Tienes razon en el trasfondo politico, es solo una muestra del poder que tienen unos cuantos de tergiversar el discurso de los que no se dejan pisotear por estos. No comprendia la razon del titulo, simplemente por que es una vision personal de un evento mas que universal, la lucha por que yo pudiera estudiar en la maxima casa de estudios (que por cierto tambien tienen razon en el tufo "neoliberal" que se detecta en muchas aulas -puedo hablan de mi experiencia personal en Arquitectura y Ciencias- pues me parece que a pesar de materias como "Extension universitaria" no deja de enseñarte a preocuparte de tu propio bolsillo, a ser un investigador "A" medianamente pagado mientras no expongas la mierda que hace la directora mascota de narro). Es una pena que "Howard"-como lo bautizamos por su aspecto nerdoburgues- tenga que venir a "defenderse" de una critia politica veraz y sin censura, es una pena que anonimos tengan que venir a atacarte, es una pena que en este pais la lucha social en cualquiera que sea su trinchera sea vista desde ojos claros con mas ganas de pasar el examen que de crecer como seres humanos como una perdida de tiempo inventada por los sucios y malolientes. Fui extra en la peli y si pones atencion paso caminando con mis greñas al fondo, a unos minutos de que termine, fui a ver la peli pensando en una pelicula, no como un retrato de la realidad, me parecio bien ejecutada, con ciertos cliches de director novato, pero como algo que valia la pena mencionar como cine mexicano. Ahora creo que la huelga fue solo el pretexto para hacerla llamativa, el tinte politico necesario para que te hagan caso, pero de acuerdo con lo que papa gobernacion dice que debemos hablar, mas bien creo que aprovecho la peli para expresar sus sentimientos hacia lo que -segun el-, fue la Huelga del 99: "(dia de la semana de su preferencia) de Huelga, (dia de la semana de su preferencia) de hueva"
ResponderEliminarDesde que supe de ella, pensé que esta película era una tontería. La huelga de 1999 en la UNAM fue siempre algo más que una torpe colección de estereotipos. Dado que hace tiempo que soy muy intolerante con las tonterías, no pensaba verla. Creo que hasta para las tonterías hay que tener buen gusto.
ResponderEliminarLo digo como uno de los "moderados" que siempre rechazó cualquier asociación con el sector estudiantil perredista que tan mal entendió este movimientio. No tengo empacho en mencionarlos y de paso aclarar que casi niguno corresponde a esta etiqueta socilógico racista de "güeritos"; no obstante, los conocí de cerca y supe la basura en la que se movían Fernado Belaunzarán, Adolfo Lluvere, Cesar Cruz, Bolivar Huerta, Marjorie Gonzales y otra decena de lidercillos qeu acabaron el gobierno del distrito fereal o en el Centro de Estudios sobre la Universidad pero que no tuvieron mayor impacto en el movimiento.
En todo caso cambié de opinión con esta estupenda crónica: habrá que ver la película; la estupidez merece atención sobre todo si es posible desenmascararla con la maestría con que lo hace Malú Huacuja.
Malú: ¿en verdad crees que por no estudiar en la unam el director está desacreditado para hablar de la huelga? ¿En verdad crees que es racista por burlarse del acento de los personajes de 'Los Olvidados'? Ese acento fue una invención del cine. Nunca, ni en Tepito, he visto gente hablar así. Perdón, pero el 90 por ciento de tus argumentos no se sostienen. ¿Porqué escribes de cine si dices que no eres crítica de cine? ¿De verdad crees que le arruinaste la noche al director? ¿Tan importante eres? Me apena tu mala vibra y envidia. Mejor escribe panfletos estalinistas. Me hiciste perder el tiempo leyendo tu crítica y escribiendo esto. Espero que no pienses que también soy un palero.
ResponderEliminarGracias Malú, tu reseña es impecable y honesta, como todo tu trabajo literario y periodístico, con tu sello irreverente que te caracteriza. Los comentarios anónimos demuestran su bajeza desde el momento de hacerlos desde esa condición. No pienso ver esa película, ni sola, menos acompañada, mucho menos comprarla. Te mando un abrazo desde Guadalajara.
ResponderEliminarGracias Malú, tu reseña es impecable y honesta, como todo tu trabajo literario y periodístico, con tu sello irreverente que te caracteriza. Los comentarios anónimos demuestran su bajeza desde el momento de hacerlos desde esa condición. No pienso ver esa película, ni sola, menos acompañada, mucho menos comprarla. Te mando un abrazo desde Guadalajara.
ResponderEliminarMuy buena mirada crítica. Ya había comentado algo acerca de la representación enfermiza y burlesca con que se pinta el movimiento; deja un mal sabor en la boca, especialmente un movimiento que al fin y al cabo fue exitoso. Sin duda tienes razón en gran parte de tus argumentos. Sin embargo, y desligándome del hecho que el Sr. Palacios pueda ser un "moderado" o incluso de derecha en el ámbito político, tiene sus puntos a favor. De cierta forma (y esto no es tan evidente a traves del guión, más bien cinematográficamente) se abre cierto espacio a una investigación (leve) sobre la creación de Subjetividades políticas noveles, más allá de la Organización u órgano político reificado, osificado. Buena crónica... letrada, incisiva... ¡BRAVA!
ResponderEliminarVi la película. También vi la huelga pero no participé en ella. Para los que después serían mis amigos en la Facultad de Filosofía siempre fui un "güero", aunque en realidad soy prieto, moreno azabache, tanto que para la mayoría no paso de naco (paradojas de este México racista).
ResponderEliminarSeñoras y señores: una cosa es la película y otra sus contenidos. O para usar una división inexacta y trillada: una cosa es la forma y otra el fondo. De la forma Malú no habla, habla del fondo. Y creo que tiene razón.
Como dije, yo no participé en la huelga, nunca estuve de acuerdo con ella. Pero ahora veo que en realidad nunca me informé, nunca salí de las lecturas que la prensa nacional hizo de ellas. Hasta hoy, antes de ver la película de "Güeros" estaba en contra de la huelga. Pero tendría que ser mucho hijo de puta si después de verla y de leer todos estos comentarios pensara igual. Algo tengo que agradecerles y es haber estudiado en una universidad pública que siguió siendo gratuita y gracias a esa educación (con todo y el cambio de programas) poder tener un pensamiento crítico.
También puedo agradecerles tanto al directo de "Güeros", como a los huelguistas recordarme algo que me enseñaron en la Facultad: "nunca hables por hablar, nunca hables de lo que no sabes". Esta película está escrita por dos personas que no saben de lo que hablan (¡Los jodidos aquí y ustedes allá en Londres!) Tan es así que tuvieron que inventarse ese pretexto de que la huelga que retrataban era una "huelga ficticia". ¿Por qué les molesta que la gente que vivió realmente la huelga comente sobre ello? La próxima vez, hagan una película de ciencia ficción, o de un tema que conozcan. Aprendan, sean humildes. Leí todo el post de corrido y me llama la atención la rabia y el odio contra Malú sólo porque no los alaba. ¡Pero si ya tienen todos los elogios del mundo! ¡Qué más quieren!
Finalmente, creo que la película puede verse desde un lado estético y parecer bien producida; pero no puede dejar de verse desde el lado político (que es explícito desde la elección del tema) y parecer un timo, una macabra burla. Forma y fondo, son inextricables.
No conocía por cierto tu blog Malú y tampoco me había cruzado con tus libros pero gracias por tu crítica y tu lucidez.
Juan Navarrete: A reserva de que cualquiera en estos tiempos se autoerige en su blog personal y hasta en su cuenta de Twitter como crítico de cine “sin saber nada de cine” y nadie se opone, si leyeras bien notarías que no estoy hablando “de cine” sino de política, y de un hecho documentado: la propaganda de desprestigio de la que fue objeto la huelga de la UNAM, en la que participan los coguionistas, los cuales tuvieron diez años para documentarse mejor. Si esta película tratara sobre los huelguistas que terminaron en la cárcel por defender la educación superior gratuita, o sobre la campaña de desprestigio que desde “la izquierda” emprendieron intelectuales como Jaime Avilés, Guillermo Almeyra, Carlos Monsiváis o Elena Poniatowska, o sobre las fotografías manipuladas en las primeras planas de los periódicos, tal vez no solamente no habría ganado festivales sino que ni siquiera habría sido seleccionada para exhibirse en alguno nacional. Por lo demás, tu pregunta de “si de verdad creo que le arruiné la noche al director”, me parece que se responde sola: con múltiples premios y cantidad de tribunas internacionales y nacionales a su disposición, con un abundante respaldo de reseñistas y blogueros que también odiaron la huelga porque se guiaron solamente por lo que leyeron en los medios, el realizador lleva un año mandando a su coguionista y a paleros a este blog, ahora diciendo que “no son paleros”, pero respondiendo con la misma ira y enjundia que hace un año… como si se tratara, precisamente, de una campaña política.
ResponderEliminarComo muestra, aquí te dejo uno de los comentarios que me llegaron hace apenas tres días, que ya ni publico porque ya sé de quién vienen (se respeta la ortografía original), en la que llegan a la conclusión de que soy una ególatra, estalinista y “señora agringada de Nueva York”:
“Juan P.V.” me dice:
“Habla del ego al final, pero creo que debería de tener autocrítica y leer sus propios "articulos" por que lo único que leí fue: soy la mejor, yo si defiendo, yo soy mas inteligente que los espectadores de esta sala, yo, yo, yo... Que lamentable que un arte tenga que estar mermado de significados políticos. Cada quien es libre de hacer lo que quiera. Claro, la mirada de Ruizpalacios puede ser un poco "pequeño burgués" hacia algo que yo no vivi y no he experimentado, pero creo que el final de la película nos demuestra un personaje que al final entiende la lucha y lo velos redimirse en el mar de manifestantes, comprendiendo su lugar en la lucha. Pero al final es su punto de vista de algo que vivió y experimento. No puedes hacer arte siguiendo el punto de vista de los demás, eso se intento en la Rusia comunista de Stalin y hubo un éxodo de artistas e intelectuales. Por que al final los artistas no quieren que les digan como ver el mundo, ellos quieren expresar su propio mundo.
“Tal vez si esta señora agringada de nueva york (digo agringada, por que no se da cuenta que escribir que vive en Nueva York la vuelve de la misma manera lo que ataca) no hubiera ido al baño para planificar aun mas su ataque hubiera entendido la película.”
Hasta aquí el comentario de “Juan PV”, quien no solamente dicta que al terminar de ver una película no se puede ir al baño antes de la sesión de preguntas y respuestas. Como podrán observar mis pacientes e informados lectores, este “partidario” –que no espectador- de Ruizpalacios es tan esquemático que piensa que “vivir en Nueva York” me vuelve “de la misma manera” que “lo que ataco”. Con su manera de razonar, todo ser humano o u organismo que “viva en Nueva York” está a favor de la privatización de la educación pública.
Te pregunto, Juan: ¿de verdad crees que si tú o este Juan P.V. no fueran colegas o compadres o aspirantes a colegas de los realizadores se tomarían la molestia de seguir insistiendo en desacreditar esta crónica un año después?
También la ví y no la recomiendo. No me instó a remembrar ese tiempo porque a mí me retrasó la huelga algunos trámites de conclusión de estudios y sin conocer toda esta discusión, claro que percibí el ardor a los chavos que defendieron y sostuvieron el paro. Sigo sin comprender porqué la consideran un filme premiable... ¿por proyectarla en blanco y negro? Lo único que me dejó el filme es la sensación que el cine mexicano lo produce gente banal y con nula formación humanística.
ResponderEliminarMalú: bien por aprovechar la oportunidad de la premiere para cuestionar frontalmente.
admiro tu valor, me gusto tu opinion y espero tener alguno de tus libros, alguna recomendacion para un neofito como yo?
ResponderEliminarsaludos
Acabo de terminar de leer la crónica y los comentarios y ambos lados tienen puntos a su favor, igual comparten una actitud narcisista Malú y Alonso.
ResponderEliminarDejando de lado la crónica muy bien hecha parece que solo nos quiere exponer que usted es la héroe de los huelguistas, por el otro lado los "compadres" de Alonso parece que si les hubieran desenmascarado al presentar una obra racista.
Mi opinión al respecto es que es una película que quien quiera se puede reflejar y quien no solo la puede disfrutar y apreciar. Yo veo la pelicula mas centrada en la CDMX, La huelga de la UNAM fue más como un pretexto para exponer la situación de los "GÜEROS" que solo se drogan en su departamento, incluso dejan claro que ellos no están ni encontra ni a favor.
PD:Buñuel no era mexicano, era español.
Gracias, Anónimo, por tu punto de vista, muy respetable para mí. Nadie dijo que Buñuel no fuera español y todos sabemos que la película filmada en México y sobre México, “Los olvidados” (1950) fue dirigida por este gran director nacido en Calanda, España. Los héroes de la huelga 99-2000, son los propios huelguistas, muchos de los cuales fueron a dar a la cárcel. La razón por la que ellos se pusieron en huelga y resistieron tantas privaciones y calumnias no fue para drogarse sino para defender la gratuidad de la educación superior en México, de la cual se siguen beneficiando los actuales estudiantes más de una década después. A varios de ellos les he dedicado mis textos, los he entrevistado y he tratado de dar a conocer su historia en este reportaje: http://www.counterpunch.org/2016/10/12/a-nasa-award-winning-mexican-robot-made-in-public-education/
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