viernes, 5 de agosto de 2011

Escombrando ideologías...

Escombrando, me encuentro con los documentos que me entregaron abogados progresistas de Nueva York con los datos duros sobre la avanzada de Giuliani contra las garantías individuales y los derechos humanos cuando fue alcalde. Recuerdo mi asombro sin fin la primera vez que me enteré de que López Obrador y Ebrard habían contratado precisamente al encargado de entrenar a la policía en Bagdad para ir a "limpiar de crimen" la ciudad donde nací. Pero esa sorpresa no anunciaba ni por asomo lo que me esperaba (a mí y a mi país) cuando envié los documentos que estos abogados neoyorquinos mandaban a los mexicanos en solidaridad, y en ausencia de un Wikileaks-Wikifugas de aquellos tiempos. Se hizo el silencio. El único periodista que me contestó fue Marco Rascón. Los periodistas “progres" de México estaban ya alineados con AMLO y Ebrard. Los consideraban víctimas del sistema y además creían que el sistema era Calderón, nada más. Que Giuliani no tenía nada qué ver con "el sistema".

3 comentarios:

  1. Malú: ¿Cómo te explicas que después del paso de Giuliani por el DF, y su tolerancia cero, los que se dicen gobiernos de izquierda en el DF hayan aprobado en la Asamblea Legislativa locasl la despenalización del aborto y el matrimonio entre homosexuales? ¿Cómo encajan esto dos hechos, estos reconocimientos de derechos, en la ecuación tolerancia cero?

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  2. Malú Huacuja del Toro6 de agosto de 2011, 22:18

    Anónimo: ¿Crees que tiene que ir a México un ex alcalde del gobierno de Estados Unidos ultraderechista republicano -que se caracterizó por odiar a los mexicanos, entre otros grupos poblacionales- a ordenarnos lo que tenemos que hacer en materia de igualdad de derechos? ¿Considerarías acaso que el pueblo de México no puede luchar y lograr una sociedad igualitaria en la que las mujeres puedan optar por la salvación de sus vidas desde el punto de vista legal (no así religioso) y exista el matrimonio sin discriminación por orientación sexual, pero también muchas otras garantías individuales? ¿Verdad que no lo pensarías así? Es tanto como decir que aquí en Nueva York el gobierno estatal aprobó el matrimonio entre homosexuales gracias a Bloomberg, o al gobernador Cuomo. A los políticos camaleónicos les gusta sentir, y hacer creer, que las conquistas de derechos civiles son gracias a ellos. A veces su apropiación es contraproducente, incluso: Hillary está invadiendo Irak y permitiendo que se incendien bibliotecas en nombre de la “libertad de las mujeres y de los homosexuales”. En nombre de esa igualdad, Hillary proclama el derecho de asesinar mujeres, niños y hombres (homosexuales y no, siempre y cuando no se sometan a sus órdenes). Pero el movimiento por los derechos civiles es otra cosa que camina independientemente del político en turno. A veces ese político ayuda por conveniencia, no por convicción. Ahora: hay negociaciones que en ocasiones se dan y no resultan del todo perniciosas. El político puede creer que "todo se lo debemos a él" (aunque no sea cierto) y ayudar a agilizar, o por lo menos quitar obstáculos, en el proceso para promulgar una ley. Todo eso puede ocurrir con o sin invitar a Giuliani y pagarle millones. Es opcional. Por lo demás, no todo se lo debemos a Giuliani. La tontería de instaurar el Premio Poniatowska (una mujer tramposa y mala escritora) seguramente no ocurrió por órdenes de Giuliani, ¿o sí? Según tengo entendido, ese premio para mujeres escritoras (que fue ganado por un hombre en su primera edición, debido a la falta de participación de las mujeres), fue iniciativa de Ebrard como respuesta al primer premio literario para mujeres escritoras que yo había instaurado, y que se llamaba Miel y Amoníaco, en cuyas bases y descripciones me burlaba, por supuesto, de la Poniatowska, "esa mujer que ve el mundo en diminutivo", dije...

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  3. Gracias por tu respuesta, Malú. Mi pregunta no iba en el sentido de afirmar o sugerir que Giuliani nos trajo al DF el reconocimiento de esos derechos, sino en el por qué por una parte los gobiernos de "izquierda" contrataron a este personaje, pero después de un estira y afloja finalmente hicieron las reformas legislativas que ellos mismos había congelado o vetado. Y esa pregunta que me planteas respecto a la lucha cívica por estos derechos, ahora que la leo, pienso que se podría aplicar a gente que no vive en el DF. Tengo amigos fuera de la ciudad de México que me han dicho que "el DF es lo máximo", que aquí sí se reconocen los derechos mencionados (aborto y matrimonio entre homosexuales), que "Ebrard y AMLO son lo menos peor para el 2012". Pero tu pregunta extendida podría ser: ¿por qué no seguir luchando por esos derechos en los estados donde no han sido reconocidos? Y de pilón: ¿por qué no pensar en un liderazgo honesto, verdaderamente progresista, no en los menos peor (que en realidad son tan peores como los peores)?

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